"Me he caído muchas veces y estoy preparado para retirarme", aseguró ayer Antonio Banderas, que presentó en Madrid La leyenda del Zorro, secuela de la película que protagonizó hace ya siete años y cuyo estreno mundial está previsto para el 28 de octubre. El actor malagueño recibió en apenas cuatro horas a 38 periodistas -en encuentros comunes de 15 minutos-, ante quienes defendió el carácter más humano y cómico de su personaje en esta secuela de La máscara del Zorro, que vuelve a protagonizar junto a Catherine Zeta-Jones y que dirige Martin Campbell. "Me gusta más el Zorro sin máscara que con ella, pues los personajes imperfectos te humanizan", aseguró Banderas que, a sus 45 años, ha notado el cansancio de un rodaje plagado de escenas de acción a caballo y de espadachines.
Banderas negó que como actor tenga problemas en Hollywood para seguir protagonizando películas -"los tendría si fuera mujer, porque Hollywood es tremendamente cruel con las mujeres, va a por la carne fresca, ahí está el ejemplo de mi esposa y muchas más como Jessica Lange o Michelle Pfeiffer-, y defendió la industria norteamericana, que le ha brindado la oportunidad de desarrollar como intérprete su carácter "más ecléctico".
Banderas comienza el 21 de noviembre en Málaga el rodaje de El camino de los ingleses, su segundo filme como director -tras Locos en Alabama-, basada en la obra de Antonio Soler y en el que participarán, entre otros, Victoria Abril y Fran Perea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de octubre de 2005