La sala de la Arquería Nuevos Ministerios, de Madrid (paseo de la Castellana, 67), expone hasta el 13 de noviembre la obra arquitectónica de Rafael Aburto (Neguri, Vizcaya, 1913) con maquetas y planos en los que utiliza también la pintura. La pintura y el ajedrez siguen siendo prácticas diarias en la vida del arquitecto.
La exposición, organizada por el Ministerio de Vivienda (www.mviv.es), está comisariada por Iñaki Bergera, que hizo la tesis doctoral sobre Aburto y la otra modernidad. "Aburto es un personaje lateral, insólito y excepcional. Los trazos de su producción se confunden con los de su personalidad. Su arquitectura se debate entre los últimos coletazos de un academicismo enmascarado y los ideales revisionistas de la tardo-modernidad", señala en la presentación de la muestra.
El montaje, sobre superficies de tablones que recuerdan alguna de sus fachadas de viviendas, sitúa en distintos ámbitos sus proyectos y concursos, relacionados con sus cuadros, con pinturas que incorpora a los planos, y un audiovisual reciente. Destacan las obras de la Casa Sindical de Madrid, con Asís Cabrero; el diario Pueblo, las viviendas de Neguri, los concursos para la ópera de Madrid y el Ayuntamiento de Toronto. También están los monumentos de los años cuarenta, de un lenguaje expresionista, locales para Gastón y Daniela, escritos y documentos personales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de octubre de 2005