Un hombre de 45 años ingresó ayer en prisión tras haber sido detenido por la Guardia Civil de Armilla (Granada) al prender fuego a la casa de su ex esposa, quien tuvo que refugiarse en el cuarto de baño para evitar que la matara.
El detenido, un vecino de Churriana de la Vega (Granada) contra el que pesaba una orden de alejamiento de al menos 500 metros de su ex esposa por malos tratos anteriores, fue detenido la madrugada del jueves al viernes, después de que irrumpiera en la vivienda tras forzar la puerta de la cochera, informó la Guardia Civil en un comunicado.
Al ver a su ex esposo, la víctima se refugió en el cuarto de baño, desde donde llamó a la Guardia Civil solicitando auxilio al temer por su vida. Ante la llegada de dos patrullas de la Guardia Civil, el presunto agresor trató de huir por la cochera de la vivienda tras prender fuego a la cocina, que fue apagado con cubos de agua, durante más de 15 minutos, por un agente que resultó intoxicado por inhalación de humos y que precisó de asistencia en el centro de salud de Armilla.
Según la Guardia Civil, el presunto agresor, identificado como R.M.R., ya fue detenido el pasado 7 de junio tras prender fuego a la vivienda de su ex mujer, en aquella ocasión con ella y sus hijos dentro.
El hombre, que ha sido detenido por los delitos de malos tratos en el ámbito familiar y de quebrantamiento de la orden de alejamiento, fue puesto a disposición judicial, que ha decretado su ingreso en prisión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de octubre de 2005