Tres modelos compactos con la imagen y el carácter deportivo de los GTi y unas mecánicas turbodiésel a la última. El Seat León, el VW Golf y el Opel Astra, protagonistas de esta prueba, destacan por su calidad de conjunto. Estos tres familiares compactos son prácticos en el día a día porque tienen un tamaño aceptable para circular y aparcar en ciudad, y un interior correcto para cumplir como coche único de solteros, parejas sin hijos o familias jóvenes. Ofrecen unas prestaciones brillantes para viajar y adelantar con desahogo, un comportamiento muy eficaz y un completo equipo de seguridad para evitar sorpresas y proteger a sus ocupantes. Y aunque no son baratos, incluyen lo suficiente para justificar lo que cuestan.
MÁS INFORMACIÓN
El nuevo León es más rentable
La llegada del León es un desafío para sus rivales en el mercado español. El nuevo Seat refleja las últimas tendencias de moda en los coches de su tamaño, aporta una línea deportiva y elegante que disimula las puertas traseras sin sacrificar el sentido práctico, la calidad mecánica de VW (comparte chasis y motores con el Golf) y un comportamiento que divierte al conductor. Todo con un buen equipo de serie y con unos precios ajustados que refuerzan sus argumentos. Se vende con cuatro motores: 1.6 de 102 CV (16.290 euros) y 2.0 FSi de 150 CV (21.240) en gasolina. Y 1.9 TDi de 105 CV (18.170) y 2.0 TDi de 140 CV (19.790). El último ha sido el elegido para la prueba, aunque en el acabado Sport-Up (22.212 euros).
Golf y Astra, dos clásicos
El Golf y el Astra son dos familiares compactos con una rivalidad histórica. El VW mantiene ese estilo inconfundible que le hace parecer mejor coche que los demás y combina un interior amplio, una suspensión cómoda y una calidad notable. Se ofrece con 10 motores: desde un 1.4 de 75 CV (14.990 euros) a una versión GTi de 200 CV (27.000) en gasolina. Y hay cuatro turbodiésel, 2.0 SDi de 75 CV (17.020), 1.9 TDi de 90 y 105 CV (18.100 y 20.190) y el 2.0 TDi de 140 CV de la prueba (23.610).
El GTC es la versión tres puertas del Astra y destaca por su línea, casi de cupé, que se refleja en la conducción. Tiene nueve motores, desde un 1.4 de 90 CV (16.560 euros) a un 2.0 turbo de 200 CV (24.880) en gasolina. Y cuatro turbodiésel: 1.3 de 90 CV (18.460), 1.7 de 100 CV (19.060) y 1.9 de 120 y 150 CV (desde 20.660 y 22.560) el último, el de la prueba.
CONCLUSIÓN
EL SEAT LEÓN se impone en esta prueba porque ofrece más por menos: una línea deportiva de trazos limpios y modernos, un interior bien resuelto y una calidad de acabado correcta. Además cuesta 1.500 euros menos que sus rivales. Incluye un equipo de serie más completo, con cargador de CD, llantas de 17 pulgadas y otros detalles que en el Golf y el Astra se pagan aparte. Aporta un comportamiento más deportivo y es el más apropiado para quienes valoran el disfrute en la conducción, aunque resulta menos cómodo en los viajes.
El Golf es la propuesta más apropiada y racional para el uso familiar porque ofrece un interior más desahogado y unas suspensiones más cómodas para viajar. Disfruta de la imagen y prestigio de VW, tiene un interior más cuidado y una calidad de acabado superior, pero resulta más caro que el Seat.
El Astra es el más indicado para quienes buscan una línea deportiva, ya que casi parece un cupé. Ofrece un comportamiento eficaz y seguro, frena muy bien y se disfruta cuando se conduce. Pero le penaliza el precio y tiene un interior menos desahogado en altura.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de octubre de 2005