La red de distribución de agua del Canal de Isabel II es insuficiente para atender las necesidades actuales de la Comunidad de Madrid. No sólo en verano hay municipios donde en las horas de mayor demanda no sale agua de sus grifos. El resto del año, en muchos hogares el agua no llega con la presión y caudal suficiente y hay municipios cuyo desarrollo urbanístico está condicionado a las posibilidades de suministrar agua.
Si se prohibiera el uso de los pozos ilegales de la Comunidad de Madrid y todo el agua que se consume la tuviera que suministrar el Canal de Isabel II, la red no tendría capacidad suficiente para abastecer a la Comunidad. La solución no es la de precintar estos pozos. La solución está en desarrollar un Plan Hidrológico de la Comunidad de Madrid, que renueve la red de distribución actual, evitando pérdidas, que sean construidas nuevas redes de distribución para atender las nuevas demandas, que sea regulada la explotación de los pozos, que construya nuevas infraestructuras de captación de recursos hidráulicos y que profesionalice la gestión del Canal de Isabel II.
No hay que esperar a las épocas de sequía para mejorar la gestión en el suministro del agua.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de octubre de 2005