Desde esta comunidad autónoma donde hace algunos años las ideas republicanas predominaban, lamento la desaparición de la columna diaria de Eduardo Haro Tecglen. Gracias por haberme dado la oportunidad de leerlo. Echaré en falta sus comentarios. Descanse en paz.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de octubre de 2005