La actual legislatura en Cataluña gobernada por el tripartito se ha caracterizado, sobre todo, por no saber aprovechar los buenos momentos de los que ha gozado, hecho que ha animado las voces españolistas más conservadoras y ha creado un clima de rechazo constante hacia todo lo que tenga relación con Cataluña.
Desde el caso Carod, un mes después de firmar el Pacto del Tinell y formar Gobierno, hasta la crisis actual abierta por el propio presidente Pasqual Maragall, después de conseguir el acuerdo sobre el texto del Estatut, ya ha pasado un año y ocho meses.
Durante este tiempo la agenda mediática y política del Estado ha tenido como uno de los elementos más importantes la política catalana, provocando que cada día se viertan contra Cataluña toda una serie de informaciones y declaraciones peyorativas.
Hasta se utilizan otras noticias de la actualidad catalana para aleccionar y crear opiniones; como fue hace unos días el caso de la televisión valenciana que sobreimpresionó la imparcial frase: "el cielo castiga Cataluña" a las imágenes de las inundaciones de la semana pasada en el Empordà. Yo me pregunto cómo hemos podido llegar a una situación como esta. ¿Quién tiene la culpa, los políticos catalanes, los políticos españoles, los medios de comunicación? La respuesta no encuentra un único culpable, todos han contribuido de una forma u otra.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de octubre de 2005