La fantasía brasileña, que se parece a la famosa napolitana, no tiene límites. Así, la ONG Fundación Mário Covas, nombre del difunto y popular ex gobernador de São Paulo, y que se ocupa del perfeccionamiento de la gestión pública, ha tenido la idea, en medio de la crisis de corrupción que agita al Gobierno de Lula y al Parlamento, de crear para los políticos una pulsera transparente que lleva escrito en letras mayúsculas el siguiente eslogan: "Ética en la política". Al revés de los otros tipos de pulseras que tanto gustan a los jóvenes, ésta para políticos será incolora y transparente, como emblema de la ética y de la no corrupción. Lo difícil, según Osvaldo Martins, presidente de la ONG en honor de Mário Covas, creadora de la idea, fue conjugar transparencia con un material maleable, tipo la goma, ya que los políticos nunca aceptarían llevar una pulsera "incómoda". Ahora falta sólo la fábrica que produzca el talismán. Se habla que habrá colas para ello. El producto va a ser goloso. ¿Qué hombre público, se dice, se va negar a llevar bien visible un símbolo de ética y transparencia en los tiempos que corren en los que dicha categoría aparece aquí, en todos los sondeos, como la profesión con menor índice de popularidad? Hay quien dice que la llevarán hasta los acusados de corrupción, que más que otros hacen profesión de inocencia. O sea, que la pulserita acabará sirviendo para todos.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de octubre de 2005