Álava sí festejó ayer el vigesimosexto aniversario del Estatuto con una recepción en la que el diputado general, Ramón Rabanera, y la presidenta de las Juntas Generales, María Teresa Rodríguez Barahona, alabaron el texto de Gernika como lugar de encuentro. Rabanera se mostró incluso abierto a su modificación -"las leyes y las estructuras que de ellas se derivan no son monolitos inamovibles", dijo-, pero pidió para ello respeto a los consensos básicos y a las reglas de juego, así como el doble respaldo de una mayoría social "muy cualificada" y el apoyo "expreso" de los tres territorios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de octubre de 2005