"Todavía no lo he decidido, pero demandar a Mourinho es una puerta que dejo abierta", dijo ayer Arsène Wenger, el entrenador del Arsenal, en contestación a las acusaciones de José Mourinho, el del Chelsea, que dijo que Wenger es un "voyeur" que tiene "problemas" con el Chelsea. "Le gusta mirar a otra gente", dijo Mourinho. "Hay gente que tiene un gran telescopio en casa y se dedica a mirar a sus vecinos. Wenger debe de ser uno de ellos. Siempre está hablando de otras familias. Y ser un voyeur es una enfermedad. No sé lo que le pasa, pero parece que esté enamorado del Chelsea. Quizá quiera dejar el Arsenal y coger mi trabajo"
"No estoy obsesionado con el Chelsea", le contestó ayer Wenger. "Esas afirmaciones están fuera de orden, son poco respetuosas y están totalmente desconectadas de la realidad", continuó. "Me preguntaron sobre el Chelsea y di mi opinión honestamente, como espero que lo haga cualquier otro mánager cuando le pregunten por el Arsenal", argumentó el preparador francés, que había dicho que los jugadores del Chelsea "no creen en sí mismos". "No sé si lo que dije se puede interpretar como algo malicioso. Pero soy muy feliz en el Arsenal y no pienso en moverme", sentenció.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de noviembre de 2005