La Ejecutiva Nacional del PSPV ha convocado esta mañana a los 12 concejales socialistas del Ayuntamiento de Alicante para comunicarles "oficialmente" que el partido es contrario al plan de Rabassa (urbanización de 4,6 millones de metros en la periferia de Alicante al margen del Plan General para construir 15.000 viviendas) y conminarles a que rectifiquen su apoyo al proyecto tramitado por el PP.
Los concejales socialistas votaron a favor de este plan el 26 de abril, cuando el gobierno local, del PP, lo sometió a aprobación provisional. El respaldo socialista al proyecto desencadenó una grave crisis en el PSPV de Alicante: el secretario general, Juan Antonio Román, contrario a Rabassa, dejó su cargo tras quedar en minoría en la ejecutiva local controlada por el concejal Ángel Franco. El partido nombró una dirección provisional presidida por el senador Antonio García Miralles.
El portavoz de la Ejecutiva del PSPV, Manuel Mata, declaró ayer que el partido ha mantenido una posición "indubitativa" sobre Rabassa. "Ese plan del alcalde de Alicante y del consejero Blasco no encaja con los criterios urbanísticos del partido y, por lo tanto, no lo apoyamos; ésta es la posición oficial del PSPV que hoy se traslada a los concejales", aseguró Mata tras una reunión de la Ejecutiva en Valencia.
A la reunión con los ediles asistirán el secretario de Organización del PSPV, Vicent Sarrià y el responsable de Institucional, Antoni Such. La conciliación de posicionamientos entre la cabeza del grupo municipal y la ejecutiva del PSPV es improbable a tenor de la firmeza con la que ambas defienden sus criterios. Con todo, Mata aseveró ayer que la ejecutiva confía en encontrar una salida al conflicto.
El portavoz municipal, Blas Bernal, y el concejal Ángel Franco mantienen que su compromiso es seguir respaldando el plan si el PP aprueba sus alegaciones. El grupo municipal presentó un centenar de enmiendas al plan, pero no tramitó la alegación del PSPV que pedía, al igual que el Colegio de Arquitectos y la plataforma contra Rabassa, la suspensión del proyecto. "Evidentemente no nos pueden pedir que votemos en contra de nuestras propias alegaciones", indicaron ediles del grupo socialista.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 4 de noviembre de 2005