El grupo de Elgoibar Arima Beltza, reivindicado en más de una ocasión como máximo exponente del blues en euskera, ha dado un cambio a su sonido en Mundurako ateak (Gaztelupeko Hotsak), su tercer álbum. En el tema Gaueko txanda se aproximan a sonidos más funkies y pop, pero lo que domina la grabación es una suerte de enérgico blues rock, sustentado por recias guitarras eléctricas que en ocasiones no desentonarían en una banda de hard rock, y coronado por la armónica.
Mientras, unir música electrónica, secuencias y programaciones con el son de la trikitixa es el reto que ha asumido Gose en su estreno. Ritxi Aizpuru, responsable de la discográfica Oihuka, destaca que el trío de Mondragón "revoluciona la cultura tradicional de la triki vasca" al aunar ritmos tradicionales, sonidos sintéticos y "textos lujuriosos escritos desde la máxima libertad".
"Pretendíamos sacar la trikitixa de los ritmos con los que se acompaña habitualmente y abrirla a otro tipo de orejas", ha manifestado el portavoz del grupo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de noviembre de 2005