Tenemos la huelga que se han sacado de la manga los conductores de Cercanías. Esto es un insulto, pues no respetan los servicios mínimos, haciéndonos llegar tarde a nuestros puestos de trabajo. Hoy he tardado dos horas y media desde Alcalá de Henares a Tres Cantos. Nos llevan como borregos hacinados en los trenes, pero nadie dice nada. El 90% de los trenes sufre retrasos, nos callamos. Nos suben los precios de los abonos (pago cada mes casi 120 euros por dos abonos mensuales) y billetes, pero nos da igual.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 8 de noviembre de 2005