Considero una injusticia la cláusula de rebajar el 40% el importe de las pensiones a los trabajadores de nuestro país que se jubilan a los 60 años, sin antes valorar que muchos de los perjudicados llevan hasta 45 años de cotización. Esto es un castigo que se suma al desprecio del esfuerzo que estas persones han realizado a favor del bienestar del país durante muchos años.
Sindicatos y Gobierno tienen la obligación moral y práctica de enmendar esta situación. Muchas personas se jubilan a los 60 años por necesidad. Tienen una larga vida laboral llena de tensiones y sacrificios. Es necesaria una rectificación de esta ley injusta.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 12 de noviembre de 2005