Quiero expresar mi satisfacción ante la noticia publicada recientemente en la que se informa de que el Ayuntamiento de Barcelona ha duplicado las multas a locales de ocio por exceso de ruido y ha cerrado otros por incumplir la normativa. Algunos no entienden que hay gente que queremos vivir tranquilos, dormir por las noches, abrir las ventanas cuando hace calor o simplemente estar en casa sin que nadie nos moleste. Tenemos que divertirnos, pero no a costa de la paciencia y la salud de los demás.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de noviembre de 2005