La última operación policial desplegada en Torrevieja contra la delincuencia juvenil a cargo de bandas urbanas se ha saldado provisionalmente con una treintena de detenidos, la mayoría de origen ecuatoriano. Los apresados pertenecen a una banda de pandilleros denominada Black Lions. Fuentes oficiales de la Guardia Civil confirmaron ayer la mitad de los arrestos, entre ellos un menor. La Comandancia de Alicante declinó ofrecer más detalles hasta el cierre de la operación.
El dispositivo policial se activó el miércoles, cuando agentes de la Guardia Civil efectuaron registros domiciliarios y batidas por el municipio, a raíz de varias denuncias de madres de alumnos supuestamente acosados por miembros de esta tribu juvenil. Esta es la segunda operación, en menos de dos meses, que se desarrolla en Torrevieja. A lo largo de la jornada del miércoles, veinte jóvenes fueron arrestados por su supuesta vinculación con la citada banda urbana. Los miembros están acusados de los delitos de asociación ilícita, coacciones y contra la integridad moral. No ha trascendido si estos implicados están involucrados en la venta y distribución de droga, ni qué objetos fueron requisados en las inspecciones domiciliarias.
La Comandancia de Alicante confirmó 15 detenidos, entre ellos un menor. La mayoría son ecuatorianos; el resto está integrado por un colombiano, un cubano y un español. Ayer, agentes de la Guardia Civil continuaron con la redada policial, apoyados por un helicóptero que sobrevoló la ciudad. Según fuentes de la investigación, más de una treintena de personas fueron arrestadas inicialmente por su presunta pertenencia a la banda. Este dato no fue confirmado por fuentes oficiales. Los arrestados pasarán hoy a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Torrevieja que, según informó la Comandancia de Alicante, ha decretado el secreto sumarial. La Fiscalía de Menores se hará cargo del adolescente.
Ayer, tras hacerse pública la operación policial, la madre de un estudiante de 12 años denunció ante el puesto de la Guardia Civil que su hijo recibió amenazas de muerte por parte de uno de los miembros, ahora detenido por la Guardia Civil. Unas semanas atrás, varias madres de alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Mare Nostrum de Torrevieja denunciaron que sus hijos habían sido amenazados de muerte por dos supuestos integrantes de la banda urbana. Los alumnos implicados fueron expulsados cautelarmente del centro durante una semana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de noviembre de 2005