Los trabajadores del hospital Severo Ochoa de Leganés comenzaron a las diez de la noche de ayer una huelga convocada por la junta de personal del centro, para exigir al Gobierno regional que ponga fin al "acoso" y las "represalias" que, según la junta, sufren los trabajadores por parte del consejero de Sanidad, Manuel Lamela. Éste pretende "silenciar a la plantilla que se ha caracterizado por la defensa del funcionamiento del hospital".
Los trabajadores exigen la retirada de los expedientes abiertos en virtud de las denuncias anónimas y el informe de expertos de la Comunidad de Madrid sobre las supuestas sedaciones irregulares, "que han sido desacreditadas tanto por los forenses como por sociedades científicas".
La junta de personal también denuncia las "maniobras" de Sanidad para dilatar los plazos en la clarificación de los hechos (interponiendo denuncias en el juzgado) y aumentando la inseguridad jurídica de los profesionales, según un comunicado de los sindicatos UGT y CC OO. Sus secretarios generales, Javier López y José Ricardo Martínez, respectivamente, acudirán a la concentración de apoyo hoy, a las 12.00, a las puertas del hospital.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de noviembre de 2005