Un total de 23.000 pasajeros han resultado afectados por la huelga que desde el pasado jueves llevan a cabo los pilotos y técnicos de Aerolíneas Argentinas -cuyo propietario es el grupo español Marsans-, y que ha provocado la cancelación de decenas de vuelos internacionales y domésticos.
Los trabajadores, agrupados en dos sindicatos, exigen un aumento del 45% en sus salarios para los pilotos y un 70% para los técnicos.
Para hoy está prevista la presencia en Argentina del presidente de la compañía, Antonio Mata, quien se enfrenta al paro más importante desde que Marsans se hiciera con el control de la aerolínea en 2001. La compañía estima las pérdidas ocasionadas en más de tres millones de dólares, y su portavoz, Julio Scaramella, ha acusado a los huelguistas de no basarse en razones laborales. "Alguien les hizo creer a estos dos sindicatos que podrán reargentinizar la empresa, que está en manos privadas". Desde que la compañía pasara a manos extranjeras (concretamente de Iberia, tras ser privatizada por el presidente Menem en 1991), existe una fuerte controversia en el país ante la falta de control argentino sobre la compañía de bandera.
168 despedidos
Aerolíneas anunció también el despido de 168 pilotos y técnicos huelguistas, y amenazó con despedir a más trabajadores que persistan en la huelga. También anunció el cierre de un centro de mantenimiento. Los despedidos no se habrían presentado en sus puestos de trabajo tras el decreto de servicios mínimos del Gobierno argentino, cuya intervención en el conflicto han solicitado la empresa y otras cinco agrupaciones profesionales que no secundan la huelga.
Los sindicatos convocantes del paro -la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA)- no han atendido el requerimiento del Gobierno a una conciliación obligatoria por lo que el ministerio de Trabajo argentino les ha abierto un expediente sancionador. "Hay que decir a los pasajeros que vamos a continuar la huelga", advirtió un portavoz de APLA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de noviembre de 2005