Dos manifestaciones, una a mediodía y otra por la tarde, recorrieron ayer las calles de Barcelona bajo el lema No al Mediterráneo del capital y la guerra. Alternativas a Barcelona +10. Fueron los principales actos organizados por una plataforma que agrupa a 60 asociaciones, entre las que figura también la coalición de izquierdas ICV-EUiA. Las marchas transcurrieron pacíficamente y envueltas en un impresionante despliegue policial.
La de la mañana fue la movilización más masiva de un fin de semana durante el que se han sucedido pequeños actos de protesta contra las políticas que desarrollan los mandatarios reunidos en la Eurocumbre, como una bicicletada en favor de Palestina o una acampada contra la especulación urbanística.
La manifestación congregó a varios miles de personas -8.000 según los organizadores, 3.000 según la Guardia Urbana- de agrupaciones de inmigrantes, de apoyo a los pueblos saharaui y palestino y ONG que marcharon en tono festivo entre la plaza de Catalunya y la sede de la Delegación del Gobierno.
George W. Bush y Ariel Sharon se llevaron la mayor parte de las críticas de los manifestantes, que también protestaron con pancartas contra las políticas neoliberales y el proceso de Barcelona. "Las políticas de los países europeos en los últimos 10 años han sido un fracaso. No se ha avanzado ni en democracia, ni en derechos humanos, ni en la mejora de la situación de los países pobres, sino al contrario. Se ha avanzado en las políticas neoliberales y se han abierto las fronteras al comercio mientras se cerraban al tráfico de personas", afirmó una de las portavoces de la organización, Esther Vivas.
Por la tarde, otra manifestación integrada por un millar de personas intentó acercarse a la sede de las reuniones, pero topó con un cordón policial en la avenida de la Diagonal, a más de un kilómetro del área del Fòrum donde se desarrolla la cumbre de jefes de Estado y Gobierno.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de noviembre de 2005