El pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Crevillent, solicitado por la oposición (PSPV y EU-L'Entesa) ante la negativa del alcalde popular, César Augusto Asencio, a debatir sobre la situación de la localidad tras los últimos incidentes ocurridos entre vecinos e inmigrantes, rechazó las propuestas de los partidos de izquierda.
La oposición reclamó siete medidas para mejorar la convivencia con el colectivo marroquí y aumentar la seguridad: la realización de un estudio sobre el municipio en materia de inmigración y otro sobre seguridad ciudadana, la creación de un Consejo Local de Seguridad, la modificación de la junta local de seguridad para dar participación a los partidos políticos de la oposición y aumentar la frecuencia de sus reuniones, la ampliación de la plantilla de la Policía Local, la creación de la policía de barrio y la instalación de un retén en la Avenida de San Vicente Ferrer, así como adecuar la reglamentación municipal para mejorar la situación en materia de seguridad ciudadana y de convivencia y la puesta en marcha de medidas para mejorar la imagen externa del municipio.
Desde los grupos del PSPV y EU lamentaron el hecho de que, a pesar de ser todas propuestas "muy equilibradas y basadas en datos y estudios reales", no se aceptase ninguna. El PP, a través de su portavoz, José Manuel Serna, y del primer teniente de alcalde, Manuel Moya, argumentó que existe suficiente participación ciudadana y que desde el Ayuntamiento se está haciendo todo lo que se puede desde sus competencias.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 29 de noviembre de 2005