El arquitecto británico Norman Foster ha diseñado una gigantesca "yurta" (la tradicional tienda donde residen los nómadas de las estepas asiáticas) para Astaná, la nueva capital del Estado petrolero de Kazajistán. Astaná, que hasta hace poco era una pequeña ciudad provinciana, se está transformando en una galería de caprichosos edificios públicos y comerciales de acuerdo con los eclécticos gustos del líder del país, Nursultán Nazarbáyev, y el interés de los inversores que financian los proyectos. La primera piedra del edificio de Foster fue colocada el 1 de diciembre en presencia de Nazarbáyev. El proyecto del arquitecto británico costará 140 millones de dólares, tendrá una estructura metálica de 200 metros de altura y una superficie de 80.000 metros cuadrados. La "yurta" (con forma de cono estilizado y ligeramente inclinado) ha sido presentado como el mayor centro de esparcimiento del país y albergará tiendas, seis cines, un centro de deportes, una piscina con playa, un minigolf y un jardín invernal. El proyecto estará listo para 2007 y es el segundo de Foster en Astaná. El primero, consiste en una pirámide transparente que albergará un centro de conferencias y otras instituciones, y que se inaugurará el verano próximo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de diciembre de 2005