La multinacional japonesa de automóviles Nissan anunció ayer que el próximo primero de julio reducirá sus concesionarios en Japón, lo que afectará a los 52 en los que es el principal accionista, y que las empresas gestoras de sus activos se fusionarán en el Nissan Network Holdings. Todo ello con el fin de mejorar su eficacia y rentabilidad.
La medida del segundo fabricante nipón de coches, participado en un 44% por el grupo francés Renault, se debe a que cree que entre el 20% y el 30% de las operaciones de sus concesionarios se solapan unas con otras en las áreas urbanas y en sus inmediaciones, así como que el crecimiento de la compañía "ha alcanzado ya su techo".Nissan tiene 142 concesionarios en el archipiélago nipón de los que dependen 2.500 pequeñas sucursales y de ellas, 300 deberán clausurarse, según las nuevas medidas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 6 de diciembre de 2005