Es una satisfacción para los vecinos de nuestro municipio, ver cómo esas expectativas eufóricas que desde el equipo de gobierno local de Almuñécar y La Herradura han ido pregonando, una y otra vez, respecto del plan de urbanismo, se les van desvaneciendo poco a poco y cada vez más; al parecer, el sentido común se ha antepuesto al desorden y a la masificación edificativa a la que especuladores y conservadores de los "ochenta" querían someter a nuestro municipio. Apuestan por un modelo de ciudad, anticuado y obsoleto, "como su creador", que no cubre las necesidades de nuestros ciudadanos y muestra de ello es que los almuñequeros y herradureños hemos dicho NO al PGOU con más de 5.000 alegaciones.
Aquí está reflejada la verdadera participación de nuestros convecinos, ésa, a la que tanto teme usted y sus testaferros, y no intente "resucitar" un plan de urbanismo que está destinado al olvido, por su mala gestión y falta de transparencia.
Almuñécar ha dicho no a la destrucción de sus recursos naturales y a la quiebra económico-social, a la que ustedes quieren someterlo, Almuñé-car y La Herradura han dicho no a su PGOU, ya que a ustedes no les ha importado "vender" Almuñécar a especuladores y "regalar" La Herradura a unos pocos, sin el consentimiento de los ciudadanos.
Sabedores y con miedo de que la opinión pública no está con ellos, intentarán sacar del "baúl de los recuerdos" un PGOU sin un apoyo real e intentarán darle ese último empuje desprocedimental, antes de que la administración correspondiente se lo devuelva, si acaso llegan a enviarlo.
Como hemos visto, al pueblo no le ha importado participar activamente, presentando todo tipo de alegaciones y siguiendo el procedimiento democrático establecido, ese procedimiento que aunque no nos guste tenemos que respetarlo, y no inventarnos otro distinto, ¿se imaginan que todos nos inventáramos un procedimiento para alcanzar una meta inalcanzable? Sería maravilloso, pero no ha sido tan difícil decir NO, acepte, retire y consensue realmente un plan de urbanismo para todos que es lo que quieren los ciudadanos. Señor alcalde, escuche usted la voz de Almuñécar y La Herradura..
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de diciembre de 2005