Una idea valiente, ésta del ciclo Alternativas. Cantautores más o menos consagrados encabezan un cartel que se complementa con una voz emergente y apenas conocida. El público acude atraído por el primero, pero puede llevarse alguna grata sorpresa con el segundo.
Montoto, por ejemplo, es un veinteañero aún bisoño, pero no desdeñable. A veces resulta predecible en la temática, pero ya afloran piezas logradas como Desnuda en el cielo. Subió luego Chaouen y, claro, el público sucumbió de inmediato a su hechizo. Audaz, libidinoso y con un punto cada vez más canalla, repasó el cancionero de su reciente Tótem y algunas favoritas de los tres discos anteriores, con el gracejo contagioso de Me como el mundo o las adicciones (amatorias y bebedoras) que pueblan los versos de Privado. Carlos parece haber encontrado ese equilibrio entre melodía elaborada y fino malditismo que le puede reportar muy buenas noches de gloria.
Carlos Chaouen + Montoto
Ciclo Alternativas. El Búho Real. Madrid, 8 de diciembre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 10 de diciembre de 2005