El concejal de Servicios Públicos de Castellón, José Pascual, confirmó ayer que el polígono en el que el lunes se registró un incendio que acabó con 200 animales y una docena de vehículos carece de bocas de riego. Los bomberos, una vez vaciadas las cubas, tuvieron que trasladarse a por agua a una zona cercana. Pascual responsabilizó ayer a los propietarios de las naves de esta carencia: el ayuntamiento "no tiene la obligación" de instalarlas.
La oposición criticó esta actitud. Según el portavoz socialista, Miguel Alcalde, el Ejecutivo local "comete un grave error" culpabilizando a los propietarios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de diciembre de 2005