Una enmienda negociada con CiU cambió el texto en el que se hablaba de las aportaciones económicas de las familias a los centros públicos y concertados y suavizó la redacción para permitir que los padres puedan colaborar con su dinero. La escuela concertada dice que esas aportaciones salvan sus "insuficientes" recursos. El texto original prohibía a los centros percibir "ni directa ni indirectamente" cantidades de las familias por enseñanzas gratuitas; ni de asociaciones o fundaciones a las que debieran pertenecer los padres y pagar una cuota.
Ahora dice que no se puede "imponer" a las familias la obligación de hacer aportaciones a asociaciones o fundaciones. Las aportaciones son una práctica habitual, pero se entiende que lo hacen voluntariamente y que nadie les impone nada. Estos cambios en la literatura del artículo suponen salvaguardas jurídicas para los centros concertados, llegado el caso de un recurso en tribunales.
MÁS INFORMACIÓN
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 16 de diciembre de 2005