La portavoz adjunta del PSOE en la Asamblea, Ruth Porta, denunció ayer que en el último periodo de sesiones se ha agravado la "deriva antidemocrática" en la Cámara regional. "Nuestro grupo va a estudiar algún tipo de iniciativa de posible reprobación de la presidenta, Concepción Dancausa, que mantiene una actitud servil con el PP", afirmó Porta. Entre las medidas que estudiará el grupo socialista está acudir al Tribunal Constitucional.
"Dancausa, empujada por su partido y por la presidenta del Gobierno regional, Esperanza Aguirre, ha entrado en una deriva antidemocrática que le ha llevado a perder toda la autoridad indispensable para ordenar y dirigir los debates en esta Cámara", denunció Porta. Según ésta, el último periodo de sesiones de la Asamblea se ha caracterizado por una presidencia cada vez más "servil" con los intereses particulares del grupo popular y "cada vez más alejada de sus funciones institucionales".
La portavoz socialista acusó al PP de imponer la fuerza de su mayoría para obstaculizar las labores de control al Gobierno regional, cada vez con mayor frecuencia y con menores escrúpulos. Entre otros ejemplos, dijo que las solicitudes de información y las preguntas por escrito que los socialistas dirigen al Gobierno regional "no son contestadas o las contestan parcialmente o fraudulentamente".
Sin amparo de la Mesa
Porta, además, aseguró que los consejeros y altos cargos no suelen acudir a las comparecencias solicitadas en comisión y que a veces excusan su asistencia minutos antes de que empiece la sesión. "Las peticiones de amparo a la Mesa de la Asamblea se han convertido en papel mojado, dada la escasa autonomía de la presidenta con respecto al Ejecutivo, y se rechazan iniciativas de la oposición con argumentos peregrinos y se aplican criterios arbitrarios para evitar malos tragos a Aguirre y su Gobierno", añadió.
Porta añadió: "Si el PP presenta alguna pregunta mal formulada, los propios miembros de la Mesa la reformulan y califican en la misma sesión". Como ejemplo citó la proposición no de ley sobre la reforma del Estatuto de Cataluña que los populares incluyeron de forma "ilegal en un pleno", y recordó las dos veces que la Mesa rechazó una iniciativa del PSOE sobre el compromiso de Aguirre con las listas de espera.
En respuesta a las declaraciones de Porta, el portavoz adjunto del Grupo Popular en la Asamblea de Madrid, David Pérez, animó al PSOE a que en el año 2006 "cambie de actitud" y lleve "propuestas a la Asamblea, en vez de crispación".
Según Pérez, el Ejecutivo de Aguirre es "el primer interesado en que exista este grado de control político". Y continuó: "Sabemos que gobernar es escuchar, y ojalá durante el próximo año podamos oír de la oposición propuestas positivas en vez de tantas descalificaciones".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de diciembre de 2005