Vitoria recuperó el pasado día 13 la figura del sereno y Barakaldo será la segunda localidad vasca que dispondrá de estos vigilantes, habituales hasta mediados del siglo pasado. El alcalde baracaldés, Tontxu Rodríguez, anunció ayer que su presencia en la calle deberá esperar al próximo verano y que se encargarán de la mejora de la seguridad ciudadana y el servicio de mantenimiento.
"El objetivo es que ayuden a los vecinos en horario nocturno", dijo, y los principales beneficiarios serán también comerciantes, hosteleros, entidades financieras o viandantes. Una de las tareas de los serenos será la seguridad "pasiva", al "disuadir de cualquier presunta actuación delictiva", señaló el alcalde.
Rodríguez aseguró que los serenos ayudarán a mejorar el servicio de mantenimiento de la ciudad y del mobiliario urbano, colaborarán con discapacitados y personas mayores en tareas como el depósito de la basura, adquisición de medicinas o el acceso a sus hogares y comprobarán que los comercios y locales de hostelería estén cerrados. Las patrullas serán desde las diez de la noche hasta las ocho de la mañana.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 28 de diciembre de 2005