El Ministerio de Fomento inició ayer las obras de ampliación de la variante de la autovía A-2 a su paso por la ciudad de Cervera (Segarra). Los trabajos, que consistirán en la construcción de un tercer carril en dirección a Lleida, comportarán restricciones de tráfico en un tramo de cuatro kilómetros durante los próximos seis meses.
La polémica autovía que une Lleida con Barcelona -su construcción se prolongó durante casi 20 años- se ha quedado pequeña cuando apenas hace un año y medio que entró en servicio la totalidad del trayecto. Desde entonces, el tráfico en esta carretera ha ido en aumento y ha superado con creces las previsiones iniciales, especialmente de camiones que utilizan la vía para ahorrarse el importe del peaje de la autopista. Cervera es uno de los puntos en los que suelen producirse embotellamientos en operaciones salida o retorno de puentes y vacaciones.
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El Ministerio de Fomento ha colocado diversos carteles para advertir a los usuarios de la autovía que la ampliación de la calzada (en sentido Barcelona ya dispone de tres carriles) comportará limitaciones en el tramo afectado, entre la salida Norte de Cervera y la conexión con el Eix Transversal, donde sólo se podrá circular por uno de los dos carriles actuales. El tercer carril se construirá aprovechando el espacio de la mediana que separa los dos sentidos de circulación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de enero de 2006