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CCOO y UGT piden 80 millones más para salvar la industria

Un manifiesto conjunto reclama a la Generalitat un plan de choque

Comisiones Obreras y UGT se han unido para reclamar a la Generalitat un plan de choque para la industria, ya que consideran que el pacto de competitividad firmado por el Gobierno catalán y los agentes sociales hace un año no dispone de suficientes instrumentos. En un manifiesto, ambos sindicatos reclaman un fondo público de 80 millones y cuestionan el funcionamiento del Instituto Catalán de Finanzas (ICF).

Las centrales sindicales han consensuado un manifiesto en el que reclaman la habilitación de un fondo público de 80 millones de euros, adicionales al presupuesto del plan de la competitividad firmado hace un año, para afrontar la reconversión que atraviesa del sector industrial.

Estos recursos, según fuentes sindicales, se destinarían a empresas en crisis, pero con viabilidad, y podrían vehicularse como créditos participativos o mediante la entrada temporal de la Administración en el accionariado de una determinada compañía.

El fondo que reclaman CCOO y UGT estaría dotado al 50% por el Gobierno catalán y por el Ejecutivo central junto con la Unión Europa, que tiene fondos para políticas industriales.

Es una de las propuestas planteadas en el documento que ambos sindicatos presentarán el 20 de febrero en el marco de un acto organizado en defensa de la industria.

CC OO y UGT reclaman a la Generalitat una actitud más determinante en la potenciación de la industria y critican el funcionamiento del Instituto Catalán de Finanzas (ICF), órgano de crédito público de la Generalitat, ya que "se comporta como una entidad financiera más, o incluso pone más dificultades" que las tradicionales a la ahora de conceder préstamos a empresas, según fuentes sindicales.

Según los sindicatos, el ICF debería "recordar que su misión es apoyar los proyectos empresariales" y suavizar sus condiciones.

Los sindicatos catalanes han puesto en marcha esta iniciativa porque consideran que el pacto de competitividad incide en las infraestructuras que requiere la empresa, pero carece de instrumentos para actuar sobre la industria de forma inmediata.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 28 de enero de 2006