Un grupo de padres y niños de la escuela Fructuós Gelabert de Barcelona realizaron ayer por la mañana un acto de protesta porque, desde su creación en 2004, los niños continúan recibiendo clase en barracones y ni siquiera se ha empezado a construir la escuela. Padres y niños, como ilustra la fotografía, realizaron un simulacro de pintar una de las paredes allí donde está previsto levantar el colegio, en la confluencia de la calle de Sardenya con la de Indústria.La Generalitat busca un acuerdo con los centros y los sindicatos sobre los días de apertura de los colegios y la sexta hora en la primaria pública
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de enero de 2006