Que la Generalitat subcontrate servicios no es nuevo. Hace unos meses se pusieron en funcionamiento unas nuevas ambulancias (Soportes Vitales Básicos) en diferentes zonas de la provincia y de la ciudad de Valencia, cuya subcontrata fue a parar a Ambulancias Ayuda. Estas ambulancias son lo anterior al SAMU, es decir si el SAMU no puede ir mandan a una de estas, o si hay múltiples heridos las mandan de apoyo. Dicha empresa contrató y sigue contratando a personal no cualificado para dicho trabajo. Supuestamente, deberían de haberles formado en el curso de Técnico en Transporte Sanitario, curso que exige la Generalitat para poder trabajar en este sector según el decreto 44/1993, pero después de 6 meses, y muchas largas por parte de la empresa, la gente sigue sin tener dicho el curso con los riesgos que esto implica (no saber realizar un masaje cardiaco, ni saber utilizar el material o instrumental de la ambulancia...), es como si te van a operar y te ponen a un carpintero. Además, ni cumplen el Convenio Colectivo (te pagan como unos 500 euros de menos), ni el Estatuto de los Trabajadores. Parece ser que a nadie le importa que haya por ahí gente jugando a los médicos con pacientes de verdad. Creo que con la salud no se juega. La Generalitat debería de saber a quien contrata e investigar si cumplen o no las leyes. De momento, a mí me han despedido por exigir tanto el curso como el cumplimiento del convenio y del Estatuto de los Trabajadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 1 de febrero de 2006