La Plataforma de asociaciones sin ánimo de lucro de la capital ha conseguido que se firme un convenio con el departamento de acción solidaria de la UCA (Universidad de Cádiz) para que los universitarios de distintas facultades hagan prácticas ayudando a las asociaciones de la capital Mi enhorabuena.
Las asociaciones sin ánimo de lucro, es decir, las que los cargos de sus juntas directivas no son remunerados estamos muy quemadas con la rigidez de las leyes. Vemos que las responsabilidades que contraemos son enormes y creo que no nos debemos quedar indiferentes esperando a que demos un involuntario o ignorante mal paso para fundirnos en un proceso judicial costosísimo. Por ello, creo que estamos necesitados de estos convenios para que tengamos asesores contables, jurídicos, que nos aleccionen bien. Asesoramientos que sí podría costearlo la CAVA o la Federación de Vecinos Solidaridad o algún ente público. Un dinero que nunca lo podemos costear cada asociación vecinal con cuotas de 0,60 céntimos la familia/mes, como es la de mi asociación de Palos Blancos, en Jerez.
La junta directiva de mi asociación está citada en los juzgado actualmente en un proceso civil que se basa, fundamentalmente, en la enorme traba que impone el artículo 12 apartado C de la nueva ley, que impone que para constituir una asamblea validamente se requiere que concurran a ella en segunda convocatoria un tercio de los socios. Veo bien que la ley controle los abusos de las subvenciones de la Unión Europea sobre el cultivo del lino o del algodón, pero parece que también nos mete en el mismo cajón a las asociaciones sin ánimo de lucro. Son cosas no comparables, creo..
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 18 de febrero de 2006