Después de que las dos principales federaciones de padres de alumnos de Cataluña, Fapac y Fapaes, respaldaran el plan de la Generalitat de aplicar la sexta hora de clase diaria en la escuela pública, ayer fueron varias asociaciones de maestros las que se manifestaron a favor de la medida.
El apoyo llegó a través de la Federación de Movimientos de Renovación Pedagógica de Cataluña, que agrupa a asociaciones de enseñantes como Rosa Sensat, entre otros. "Es una oportunidad [la sexta hora] de avanzar en la cohesión social y la equidad mediante el servicio público educativo" y representa "un aumento de las oportunidades educativas de los niños de la escuela pública que corrige una desigualdad que les perjudica", dijo la entidad.
Sobre la autonomía de los centros que propugna el pacto, la entidad destacó: "En conjunto se recogen muchas medidas que apuestan por un avance de la escuela pública y se facilita a la vez que la escuela privada pueda participar en este servicio público y, por tanto, participar, en la labor de la equidad".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 4 de marzo de 2006