Dos graveras, en Villa del Prado y San Martín de la Vega, han sido clausuradas en la región en las últimas semanas. J. G. G, propietario de una cantera ilegal situada en un parque natural protegido junto al río Alberche, ya fue sancionado con 90.000 euros en julio de 2005 por extraer grava de forma ilegal en Villa del Prado. Además, debía detener la explotación y restaurar el terreno. Pero el empresario siguió excavando y hace tres semanas agentes del Seprona le precintaron la gravera. J. G. G. decidió abrir entonces una nueva explotación en el terreno colindante.
La Guardia Civil y la Consejería de Medio Ambiente estudian ahora las medidas a adoptar contra el empresario y barajan inculparle por un delito contra el medio ambiente.
Por otra parte, Medio Ambiente anunció ayer que ha paralizado las labores extractivas de una gravera ubicada en el Parque Regional del Sureste. Agentes forestales, ambientales y del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) precintaron los accesos a esta explotación, que tiene una superficie de ocho hectáreas y se ubica en el término municipal de San Martín de la Vega.
El cierre es una medida cautelar que se suma a la apertura, el pasado diciembre, de un expediente sancionador por parte de la Dirección General de Promoción y Disciplina Ambiental, según la Comunidad de Madrid. Aparte de desarrollar la actividad extractora con una declaración de impacto negativa, la empresa sancionada actuaba por debajo del acuífero, circunstancia que no se permite en ningún caso en una extracción minera.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 4 de marzo de 2006