El museo del transporte que el Ministerio de Fomento proyecta ubicar en los terrenos que ocupaba el Campamento Benítez de Málaga costará en torno a 300 millones de euros, según adelantó ayer la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez. La cifra da idea de la ambición con la que la ministra malagueña se plantea la recuperación como equipamiento público de un espacio privilegiado de 250.000 metros cuadrados en la frontera entre los términos municipales de Málaga y Torremolinos y por cuya propiedad aún litiga el Ayuntamiento con el Gobierno.
Álvarez ha implicado a ocho entidades públicas y privadas que ayer firmaron un protocolo de colaboración (Consejería de Obras Públicas, Ayuntamiento, Diputación, Universidad, Cámara de Comercio, Unicaja y las constructoras Sando y Vera. De momento no expresa más que una declaración de intenciones y en el plazo de seis meses deben acordar la fórmula jurídica de la unión y el reparto de funciones que corresponderá a cada cual.
Para la redacción del proyecto se va a convocar un concurso internacional de ideas. Según Álvarez, el museo tratará todos los modos del trasporte, lo que dijo lo hará único, será interactivo y con piezas móviles, con doble carácter lúdico y educativo, y albergará un centro internacional de estudio e investigación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de marzo de 2006