Jaume Figueras es de esa clase de cinéfilo que le quita al cine el aire pedante que le dan los eruditos, que viven con una ficha en la cabeza y te la sueltan a medida que pasan los planos. Así que cuando aborda una retransmisión como la que en la madrugada del domingo al lunes hizo Canal + de la fiesta de los Oscars te dan ganas de invitarle a una copa para que se quede en tu casa. Y resulta que al final de la retransmisión, poco después de las cinco y media, este hombre de pelo en pecho, que además descubrió más a medida que avanzó la madrugada, le dijo a Àngels Barceló, que se estrenaba en el menester: "Àngels, ahora me tendrás que invitar a una copa, para prolongar la fiesta". Àngels le dijo que sí, claro; los dos se lo habían pasado muy bien, e hicieron que en las casas eso se notara también. Àngels tiene con la tele un contacto muy serio, pues lo suyo son los informativos, los análisis y las entrevistas, y de hecho aquí se quejaba el último viernes de que la televisión está expulsando los contenidos amplios o sesudos.Su experiencia en la radio, donde ahora hace también variedades en A vivir que son dos días (cadena SER), le ha conferido la soltura suficiente como para bordar una retransmisión de esa clase. Tuvieron, al principio, a Martina Klein, para que les fuera diciendo qué le parecían los vestidos utilizados en la gala, pero la modelo tuvo poca materia, porque allí abundaron los hombres; Lola Carretero, en Tele 5, le sacó ayer mucho partido a los trajes de las mujeres de la gala, pero es cierto que en tiempos de la igualdad los hombres siguen mandando. Y hubo una chica nueva, Cristina Teva, que agilizó desde Hollywood el contacto de Àngels y de Jaume con los famosos. Clooney se prendó de ella; es fresca como Nuria Nebot, la de Eva Hache, y con esa frescura despachó al guapo, que protagonizó uno de los gags más simpáticos de la noche, cuando el humorista Jon Stewart le dijo: "Buenas noches, y buena suerte, eso es lo que les dice George a las chicas cada noche".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 7 de marzo de 2006