La jornada del Día Internacional de la Mujer transcurrió en el País Vasco con múltiples concentraciones, pronunciamientos y citas reivindicativas, unas en clave de lucha y otras más lúdicas. Así fue el acto que refleja la fotografía, en el centro de San Sebastián, que sirvió para parodiar los desfiles de moda y llamar la atención sobre la imagen de la mujer que se quiere transmitir. Desde el Ayuntamiento de Bilbao se llamó a "la insumisión" de las mujeres "frente al cuidado obligatorio" y se reclamó que los hombres "asuman su parte" en el trabajo doméstico y en la atención a los demás. Por la mañana, centenares de personas respondieron a las distintas llamadas de las centrales sindicales, que se manifestaron ante las tres diputaciones (los sindicatos nacionalistas) y ante la sede de Confebask en Bilbao (CCOO). La UGT aprovechó la fecha para entregar el Premio 8 de Marzo a la sindicalista Serafina González. Por la tarde, se sucedieron marchas en las tres capitales. Aunque la igualdad fue la base de todas las reivindicaciones, también se denunció la precariedad laboral femenina y la violencia machista y se pidió que se aplique la ley vasca de Igualdad, aprobada hace un año.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 9 de marzo de 2006