El Tribunal Supremo deberá pronunciarse este mismo año o el próximo sobre otros dos proyectos urbanísticos en zonas protegidas que ya han sido anulados por otras instancias judiciales. El primero se halla además al lado de Plentzia, en el municipio de Barrika, y afecta a la construcción de 97 chalés en un área protegida, donde los intentos de edificar se remontan a 1987 cuando se planteó construir 349 casas. Los proyectos se han topado siempre con la oposición del Departamento de Medio Ambiente al tratarse de una zona de especial de protección, pero el Ayuntamiento de Barrika y la Diputación han porfiado para que salieran adelante.
En noviembre de 2004, el Tribunal Superior vasco declaró nula la recalificación aprobada por la Diputación debido al "interés natural y paisajístico de la zona" y consideró "arbitraria" dicha modificación urbanística. La institución foral y el Ayuntamiento de Barrika han recurrido esta decisión al Supremo.
Pese a esta situación, hay 14 chalés concluidos, ya habitados por sus propietarios, y el consistorio autorizó otra licencia de obras siete meses después del fallo del Superior.
El segundo caso afecta la reserva de la biosfera de Urdaibai, donde la institución denunciada es la consejería de Medio Ambiente. Este departamento autorizó la construcción de más de 20 chalés en el corazón de la reserva, en terrenos de los municipios de Sukarrieta y Arteaga, en una zona sita entre las marismas y el encinar cantábrico, las dos joyas naturales de Urdaibai. El Superior, en un fallo dictado el pasado 28 de abril, estimó que Medio Ambiente cometió una "infracción directa" de la ley de protección de Urdaibai y actuó con "arbitrariedad" y de manera "incongruente" e "incoherente".
La sentencia consideró injustificable la necesidad de más suelos urbanos en el barrio de Kanala y estimó que la "nueva ordenación [urbanística] resulta arbitraria por ausencia de una justificación razonable". El Gobierno recurrió al Supremo al entender que el plan era "la mejor solución" para la zona.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 17 de marzo de 2006