Dos maneras distintas de mirar la poesía de nuestro tiempo se han dado cita en el XVIII Premio Internacional de Poesía Loewe. Guillermo Carnero, representante de la línea culturalista y de la metapoesía, reflexiona sobre belleza y realidad en Fuente de Médicis (Visor), un poema "dialógico" con el que se alzó ganador del premio.
"Mi experiencia cotidiana se muestra a través de la cultura", explicó ayer el poeta en la presentación del libro, con el que completa una trilogía que inició con Verano inglés.
Para el ganador del Premio a la Creación Joven, Joaquín Pérez Azaústre, con el libro El jersey rojo, su obra parte de la fascinación lectora y cinéfila.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 23 de marzo de 2006