Decenas de vecinos, padres y madres de alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria Sierra de Gádor, en Berja (Almería), se concentraron ayer en el patio del centro escolar para exigir la construcción "sin más demoras" del nuevo instituto, aprobado en el año 1996. Hasta dos años después no se adquirieron los terrenos y las obras se adjudicaron en 2000, pero se paralizaron por supuestos errores cometidos en el estudio geotécnico de los suelos.
El retraso acumulado motivó un incremento en los precios a los que el constructor no podía hacer frente con el presupuesto previsto inicialmente. "Hubo que hacer una revisión de precios desde la propia Consejería en Sevilla, que dio una respuesta algo ambigua, aunque el viceconsejero nos comunicó que las obras se iniciarían el mes de enero pasado. Pero ha pasado enero y febrero", explicó la portavoz de la coordinadora Rosalía Ruiz.
Transcurridos ya tres meses desde el inicio de año sin que se hayan iniciado los trabajos, padres y vecinos del municipio se concentraron ayer para exigir las nuevas instalaciones que la Delegación de Educación en Almería espera tener listas a finales de diciembre.
La falta de infraestructuras educativas en el municipio ha propiciado que profesores y alumnos de Primero y Segundo de ESO den clases desde el año 98 en "aulas provisionales" de preescolar habilitadas para ellos. "Queremos que nuestros representantes políticos y las administraciones responsables vean que la sociedad de Berja está encima, vigilante, exigiendo que las obras han de estar concluidas en el menor tiempo posible", insistió la portavoz de la coordinadora.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 31 de marzo de 2006