El Consejo Económico y Social (CES) dio ayer luz verde al polémico reglamento antitabaco de la Comunidad de Madrid, que suaviza la ley estatal, con el voto a favor de los empresarios y de los expertos designados por el Gobierno regional y en contra de CC OO y UGT.
El CES, sin embargo, hace dos recomendaciones importantes al Gobierno regional. La primera es de tipo económico, ya que el proyecto de decreto aprobado por el Consejo de Gobierno no prevé fondos económicos para la aplicación del reglamento, lo que el CES cree "difícilmente compatible con la aplicación y desarrollo del" reglamento.
La segunda recomendación hace referencia a la financiación de los tratamientos para dejar de fumar, como los parches de nicotina. El proyecto prevé que sean las empresas y los trabajadores, en el marco de las negociaciones laborales, los que acuerden la financiación, mientras que el CES cree que el dinero debería salir de los presupuestos de la sanidad pública.
El CES, sin embargo, no cuestiona uno de los aspectos más polémicos del reglamento, que permite fumar en las cafeterías de empresa mayores de 100 metros cuadrados, algo prohibido por la ley estatal.
Los sindicatos acusan al Gobierno regional de utilizar "la salud pública" para mantener su política de confrontación con el Gobierno central y proponen un reglamento más estricto y ajustado a la ley estatal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 7 de abril de 2006