La presión del precio del petróleo sobre la economía tomó ayer un carácter más oficial con la revisión a la baja, por parte de la CE, de las estimaciones de crecimiento para este año en la eurozona. La respuesta de los mercados de valores fue parecida a la que de forma espontánea tomaron los inversores el día anterior, aunque no tan desastrosa.
El Ibex 35 terminó la sesión con un descenso del 0,62% y a punto de perder los 11.600 puntos, cuando hace menos de un mes eran numerosos los inversores y analistas que veían el nivel de los 12.000 puntos como algo fácilmente alcanzable. El Ibex Medium cedió el 0,79% y el Ibex Small Caps el 0,18%, lo que indica la disparidad de criterios que se barajaron, aunque siempre dentro de una orientación muy definida.
El dato definitivo del PIB del cuarto trimestre de 2005, que se mantiene en el 0,3%, estaba llamado a pasar por el mercado sin llamar la atención, pero nadie contaba con el añadido que traía el comunicado de la CE, en el que revisaba a la baja las estimaciones de crecimiento para los tres primeros trimestres del actual ejercicio. A esta sorpresa hubo que añadir el toque de atención del BCE sobre el aumento del crédito y la amenaza que supone para el crecimiento y los precios el comportamiento del petróleo.
Estas advertencias provocaron una ligera recuperación en la rentabilidad de la deuda pública que, en el caso del bono español a 10 años, se situaba en el 3,92%, al tiempo que el euro se recuperaba frente al dólar.
La contratación en el Mercado Continuo ascendió hasta los 4.225,80 millones de euros, en parte gracias a las operaciones "de vuelta" del lavado de cupón con acciones del BBVA. Las operaciones "abiertas" sumaron 2.908,94 millones de euros.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de abril de 2006