Los centros específicos para enfermos mentales crónicos (Ceem) podrán acoger a personas mayores de 65 años "atendiendo a su entorno familiar y social" y otros condicionantes, según el borrador de la orden elaborada por Bienestar Social para regular estos centros. Sindicatos y asociaciones de familiares se han mostrado contrarios a residencias que atiendan tanto a mayores como enfermos mentales.
El borrador de la orden establece en la disposición adicional primera que los Ceem -un recurso residencial- podrán acoger a mayores "atendiendo a su entorno familiar y social, al informe facultativo y/o la documentación que lo acredite y previa propuesta técnica". Pero también permite autorizar centros de tipología mixta "u otros para personas con discapacidad y con enfermedad mental crónica distintos a los expuestos en la orden siempre que se justifique la necesidad de su creación", entre otros criterios.
Bienestar Social da de esta forma un paso más en la regulación de los centros mixtos, destinados a albergar personas con diferentes perfiles -mayores, enfermos mentales, discapacitados-, después de que el decreto de acreditación de centros de atención social de 2002 aludiera a esta posibilidad "cuando las circunstancias lo aconsejen" y "siempre que el proyecto terapéutico o educativo sea adecuado para cada grupo de usuarios y compatible entre todos ellos".
Bajo esta fórmula se autorizó provisionalmente el centro de Massamagrell en el que murieron cinco personas y que albergaba a personas con enfermedad mental pese a tener permiso para residencia de mayores.
CC OO censuró el recorte de exigencias terapéuticas que fija la nueva orden mientras que Bienestar Social señaló que se introducen mayores garantías de personal especializado. Además, fuentes de la consejería señalaron que los centros mixtos están extendidos en toda Europa como casas de cuidados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 20 de abril de 2006