Me dirijo a usted para hacer referencia al artículo La violencia irrumpe en la campaña mexicana, publicado en la sección Internacional de EL PAÍS el 26 de abril de 2006. Sobre el particular, deseo transmitirle mi desagrado por el amarillismo de dicha nota. Si bien en México hay violencia vinculada al narcotráfico, no hay violencia política, como sugieren el título del artículo y la fotografía que lo acompaña. Hasta ahora, la campaña electoral ha transcurrido en un clima de absoluta normalidad y los candidatos de los diferentes partidos políticos han realizado sus actividades proselitistas sin riesgos para su integridad física.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de abril de 2006