El colectivo Esglèsia Plural, colectivo formado por cristianos de base y progresistas de Barcelona, empezó ayer una campaña bajo el lema No al estilo de la COPE, en la que pide a los creyentes que en la declaración de la renta de este año no coloquen una cruz en el apartado de asignación tributaria de la Iglesia, pero sí en la casilla destinada a fines sociales.
El presidente de Esglèsia Plural, Josep Torrens, explicó que con esta medida "sólo se trata de protestar contra los contenidos de la cadena radiofónica COPE". Según Torrens, marcar sólo la casilla destinada a fines sociales "no perjudicará ni a la Iglesia ni su obra social", una vez que "los acuerdos entre el Vaticano y el Gobierno español garantizan que la Iglesia siempre recibirá la misma cantidad de dinero del Estado para atender a sus necesidades".
Esglèsia Plural mantiene que, gracias a la declaración de la renta, el creyente puede "influir" y "expresar qué piensa sobre el apoyo que una parte de los obispos españoles ofrece la COPE". El colectivo progresista pide que se actúe con "coherencia", considerando que no hacerlo puede convertir a los católicos catalanes, ante la sociedad y su propia consciencia, en cómplices de esa situación.
El colectivo ya había llevado a cabo otra campaña de protesta contra la emisora basada en el envío de centenares de correos electrónicos a la Conferencia Episcopal Española o a la Conferencia Episcopal Tarraconense, entre otras instituciones. En los mensajes, Esglèsia Plural afirmaba que la COPE, a través de algunos de sus programas, había "traspasado todos los límites".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 4 de mayo de 2006