María Paz Artolazábal, viuda de José Luis López de Lacalle, el columnista asesinado por ETA hace ahora seis años, asistió ayer con su hijo Alain al homenaje que familiares, amigos y compañeros del PSE le tributaron en Andoain ante el monolito erigido en su memoria. Artolazábal explicó que tiene "esperanza", pero "con cautela", ante el proceso de paz abierto y se lamentó de que el alto el fuego llegue "40 años tarde". Después se mostró partidaria de que los presos de ETA que tengan "las manos manchadas de sangre sigan en la cárcel". Acompañaron a Artolazábal otras víctimas de ETA, entre ellas la viuda del concejal socialista de Lasarte Froilán Elespe. El alcalde de Andoain, Antonio Pérez Gabarain, calificó al homenajeado de "luchador incansable por las libertades".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 8 de mayo de 2006