El barrio del Sud-Oest del Besòs, de Barcelona, en el límite con Sant Adrià de Besòs, se prepara para la reurbanización de algunas calles. Concentrado en la transformación del área del Fórum, el Ayuntamieno de Barcelona había dejado en un segundo plano esta zona de la ciudad. Hace unos días, el consistorio aprobó un proyecto para reformar el espacio público entre las calles de Lluís Dalmau, Alfons el Magnànim, Ferrer Bassa y Perpinyà.
La intervención prevé mejorar la pavimentación de las aceras, construir una nueva red de riego, instalar mobiliario urbano y, sobre todo, sustituir las instalaciones, que han quedado obsoletas e inoperantes con el paso de los años.
El barrio tiene su origen en la década de los años cincuenta con la llegada de inmigrantes de otras partes de España. Todas las viviendas (unas 6.000) son de protección oficial, según explica el presidente de la asociación de vecinos, Narciso Ximénez Rojas. La antigüedad genera problemas y, para solucionarlos, las compañías de servicios soterrarán las líneas de teléfono, cambiarán la red de cloacas y renovarán el tendido eléctrico.
El proyecto, que tiene un presupuesto de 16,4 millones de euros, "es algo positivo para el barrio", apunta Ximénez. No obstante, el proyecto no resolverá algunos de los problemas del Sud-Oest del Besòs. El representante vecinal afirma que el mantenimiento de los edificios por parte de los propietarios -en especial de las fachadas- resulta "muy deficiente". Además, las vigas de las viviendas están construidas con cemento aluminoso. Siete edificios tuvieron que ser derribados por este problema, y en la mayoría se efectuaron reparaciones.
Sin embargo, todavía hoy el 35% del parque de viviendas, de acuerdo con los datos que maneja la asociación de vecinos, no ha sido objeto de ninguna reforma. "El paso del tiempo y las reformas que la gente lleva a cabo en su casa agravan la situación, y hay riesgos", asegura Ximénez, quien matiza que aún no ha habido que lamentar ningún "incidente grave" por culpa de la aluminosis.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 14 de mayo de 2006