Un niño de 13 años del municipio almeriense de Dalías murió la noche del martes electrocutado en la azotea de un inmueble de la calle Quinta Almohara, donde jugaba con un amigo.
Un familiar del menor relató que, sobre las 21.00, el chaval vio unos pájaros posados sobre el techo y cogió un alambre que pegó contra el cable, situado a dos metros y medio de donde jugaban los niños.
Sólo 15 minutos después del aviso, un equipo de emergencias del 061 llegó a la zona para atender al pequeño.
Cuando los facultativos llegaron hasta el lugar de los hechos, el niño se encontraba en parada cardiorrespiratoria. Los ejercicios de reanimación que le practicaron resultaron infructuosos.
El cuerpo fue trasladado hasta Almería una vez efectuado el levantamiento del cadáver por el juez de guardia para practicarle la autopsia.
El multitudinario entierro se celebró ayer por la tarde en la iglesia de Santa María de Ambrox, en el municipio. El Ayuntamiento de Dalías ha decretado un día de luto por el accidente. El alcalde, Jerónimo Robles, lamentó lo sucedido y aseguró "no tener palabras" ante la desgracia ocurrida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de mayo de 2006