El C6 actualiza la tradición innovadora de Citroën y ofrece una línea original y un confort sobresaliente. Pero también incorpora valores clave en una berlina de lujo, como un tacto exquisito, un comportamiento impecable y un equipamiento refinado que exaltan sus virtudes.
Máxima comodidad
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El nuevo Citroën incluye la última evolución de la suspensión hidroneumática inteligente, que varía la altura al suelo y la dureza según el trazado y estilo de conducción, buscando el compromiso ideal entre estabilidad y confort. Así, ofrece la máxima comodidad cuando se viaja tranquilo en autopista y es más firme si se aumenta el ritmo en las curvas. Además, lleva un programa Sport más enérgico que hace más directa la dirección y permite trazar con más precisión sin apenas perder confort.
El conjunto coordina en perfecta armonía la respuesta del motor, el cambio y las suspensiones, y permite conducir con la punta de los dedos y viajar con el mínimo esfuerzo. A ritmos suaves con los reglajes normales navega en silencio sobre el asfalto, sin que se noten los baches. Y con la suspensión Sport permite disfrutar su estabilidad y aplomo con tranquilidad, porque el C6 hace todo de forma natural y el conductor sólo tiene que guiarlo por el asfalto. Pero lo importante es que convierte un viaje largo en un paseo y se llega al destino sin el menor cansancio, algo al alcance de pocas berlinas. Además, tiene una estabilidad a toda prueba en autopista y trazados rápidos, y aunque por tamaño no ofrece la agilidad de las berlinas más deportivas, gira muy plano en las curvas sin balanceos laterales y resulta noble y manejable.
Los frenos paran con el poderío y equilibrio de los mejores Citroën y la suspensión evita los cabeceos de la carrocería cuando se frena a fondo. Además, el acabado Exclusive incluye un completo equipo de seguridad, con un buen ESP, la alerta de cambio de carril, que hace vibrar el asiento al pisar la línea blanca, los faros bixenón, que giran en las curvas, o la pantalla virtual, que proyecta informaciones en el parabrisas para no apartar la vista de la carretera.
Motor V6 biturbo de gasóleo
El C6 equipa el motor 2.7 V6 turbodiésel de 208 CV con un cambio automático de seis marchas que incluye programa deportivo y manejo secuencial. El conjunto destaca por su suavidad, es silencioso y no vibra nada, lo que unido a la calidad de rodadura y la insonorización sitúa a este coche entre las mejores berlinas para hacer viajes largos. Así, ofrece unas prestaciones brillantes, acelera con brío y reacciona con nervio al adelantar. Pero sobre todo responde muy bien a bajo régimen, gana fuerza con alegría hasta casi las 5.000 vueltas y mueve el elevado peso de este coche sin dar sensación nunca de ir forzado. Y se nota en el consumo, porque gasta poco para su cilindrada: ocho litros en conducción suave, 10 estirando las marchas y 12 en ciudad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 20 de mayo de 2006